Desde que los Reyes Católicos unificaron los reinos de España, a ningún español se le ocurrió la idea de que la cultura tenía que dar marcha atrás, y volver a un separatismo enconado por luchas entre los pueblos invasores. Porque según este sofisma, que más o menos se plantea hoy, aprovechando la libertad que brinda nuestro régimen democrático, ocupar Vasconía, y Cataluña, tendrían derechos históricos e idiomáticos los pueblos que invadieron la Península. Y, no debe sorprendernos esta peregrina suposición, porque andan por ahí algunos árabes contemporáneos diciendo que a ellos, les pertenece "El Andalus." Territorio que se extendía desde el Sur de España hasta Francia. Tampoco debe sorprendernos que Cataluña, movida por algunos catalanes, pretenda lo mismo que se quiso imponer por la fuerza en tiempos de la dictadura del General Primo de Rivera. De manera que, por si fuera poco lo que piden, además deberíamos agradecer al Presidente de esta Comunidad Más, promover esta restauración sin los desafueros de entonces, ni el terrorismo de Eta.
Los españoles de acá, y de allá, se preguntan, sí tan histórica memoria le viene a más y mejor con el dinero que recibe de los demás españoles, y que debería dedicar a sufragar los gastos que todos hemos aprobado por votación para pensiones, educación, sanidad, seguridad social y demás necesidades prioritarias, cuya administración les fue otorgada a las 17 Autonomías previstas en la Constitución y votadas por esa mayoría de españoles que no han votado la independencia de Cataluña. Dínerito del que cobra su sueldo, y de cuyo volumen económico está gastando millones de euros. Vellón de España, y no de Tarrasa o Manresa, y menos de su bolsillo; mientras los parados, malditos de la farsa, aún cuando no protestan, le están gritando con la realidad: "!Cual gritan esos malditos, pero mal rayo me parta si concluyendo esta carta no pagan caro sus gritos¡" ( escena 1ª del Don Juan de Zorrilla).
No parece ser ese el mismo principio que animó al "Comendador de la Orden de Alfonso X el Sabio Ilustrísimo Señor D. Eduardo Lence-Santar y Guitián, Cronista oficiar de la Muy Noble Leal y Fiel Ciudad de Mondoñedo." Titulo del opúsculo que me dedicó su autor, amigo eximio y Vocal que fue de la Junta Directiva, José López Sánchez, Teniente Coronel de Ingenieros, Director de RED, Revista de este Cuerpo de Ejército, Abogado y miembro de la Real Academia de las Letras Gallegas. Leemos en un párrafo donde se muestra el retrato del Cronista, este comentario referido a él:
"...hicieron del Marqués de Rodil un soldado prefulgente de la Patria que mostró al mundo cómo se forja el eterno espíritu de España."
Muchos autores han escrito sobre la fascinación que produce el uso del poder. Nubla la razón, y perturba el carácter. Octavio Aceves, en el prologo sobre "Las Profecías de Nostradamus" (versión en Español), refiriéndose al autor de este libro cuya autodenominación es "Nostradame, entre otras cosas, dice:
"Él sabía que quienes ostentan el poder son capaces de los crímenes más atroces..."
Se refería al poder que tuvo la Inquisición. Poder superior al de un Estado. y con respecto al lenguaje usado por quienes lo representaban, añadía:
"...su verborragia docta, formando un rompecabezas que sólo la casta de los sabios puede recomponer."
También en un libro de poesías que tuve el honor de recibir dedicado por su autor, Víctor Córdoba Herrero, titulado: "A pesar de...Tus ojos saben a rimel de cartas," En la página 29, "Pausas de mi azotea.- Mejor acompañaría a Machado," Expresa:
" Urge lavar doquier corrupción (no veas esta guinda lo podrida que está), achicar el doble lenguaje. Aquí, todo el mundo quiere engancharse al enriquecimiento rápido al precio que sea. La capacidad de sacrificio, el ahorro y el trabajo, son naipes que ya no están en la baraja de los días. Contesta a vuelta de viento que estoy desolado entre tus versos: "Por estos campos de la tierra mía/ bordados de olivares polvorientos,/ voy caminando solo,/ triste, cansado, pensativo y viejo.""
José de Saramago, Premio Nobel de Literatura, escribió en el periódico Opinión, el 17 de octubre de 2008, con el título" CRIMEN (financiero) CONTRA LA HUMANIDAD," el artículo, del cual transcribo alguno párrafos:
"...todos nosotros, que presenciamos, impotentes, el avance aplastante de los grandes potentados económicos y financieros, locos por conquistar más y más dinero, más y más poder, con todos los medios legales o ilegales a su alcance, limpios o sucios, normalizados o criminales..." "...y ya que hablamos de delitos: ¿tendrán los ciudadanos comunes la satisfacción de ver juzgar y condenar a los responsables directos del terremoto que está sacudiendo nuestras casas, la vida de nuestra familia, o nuestro trabajo? ¿Quien resuelve el problema de los desempleados (no los he contado, pero no dudo de que ya son millones) victimas del Crah y que desempleados seguirán durante meses y años, mal viviendo de míseros subsidios del Estado mientras que los grandes ejecutivos y administradores de empresas deliberadamente conducidas a la quiebra, gozan de millones y millones de dólares cubiertos por contratos blindados que las autoridades fiscales, pagadas con el dinero de los contribuyentes. fingen ignorar?
"Lo que está pasando es, en todos los aspectos un crimen contra la humanidad y desde esta perspectiva debe ser objeto de análisis, ya sea en los fondos públicos, o en las economías. No exajero. Crímenes contra la humanidad no son solo genocidios, los genocidios, los campos de muerte, las torturas, los asesinatos colectivos, las hambres deliberadamente provocadas, las contaminaciones masivas, las humillaciones como método represivo de la identidad de las victimas. Crimen contra la humanidad es el que los poderes financieros y económicos de Estados Unidos, con la complicidad efectiva o tácita de su gobierno, fríamente han perpetrado contra millones de personas en todo el mundo, amenazadas de perder el dinero que les queda después de muchísimos casos (no dudo que sean millones) haber perdido su única y cuantas veces escasa fuente de rendimiento, es decir, de su trabajo. Los criminales son conocidos, tienen nombres y apellidos, se trasladan en limusinas cuando van a jugar al golf, y tan seguros están de si mismos que ni siquiera piensan en esconderse. Son fáciles de sorprender. ¿Quien se atreve a llevar a este gang ante los tribunales? Todos le que daríamos agradecidos, sería señal de que no todo está perdido para las personas honestas."
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