No faltaron críticas, ni de Prensa, ni de radio, y como colofón la Compañía de Teatro de Emilio Ramos la incorporó a su repertorio según la carta recibida de Rafael Guerrero de Valencia, que a continuación se transcribe, y por el texto de la misma nos evitamos reproducir aquella a la que alude:
"PRODUCTOR CINEMATOGRÁFICOS ASOCIADOS". - "PRO-CÍAS". - "GERENCIA" "RAFAEL GUERRERO" "Valencia" "Gran Vía Ramón y Cajal, 47".- R/F, 31 Julio.1958".- "Sr. Don Jesús Dumont". - " Muy Sr. mío: Sin ninguna noticia de ustedes hoy leo en el Semanario DÍGAME que la obra la lleva la compañía de EMILIO RAMOS.
Quizás esta Compañía le interesa el asunto de Teatro Católico que yo tengo para América después de su turne por España.
Ya saben que pueden disponer de mi como gusten. Su affmo y SS q.e.s.m., Guerrero".
Miren ustedes por donde resultó, que esta Obra de Teatro tachada en su totalidad por la Censura, tal y como si hubiera sido escrita con el rabo del diablo, fue acogida por el público que de ella supo, como ejemplo ponderable de Teatro Católico. Razón que motivó su puesta escénica en el Instituto de Cultura Hispánica, con comentarios narrativos de Don Ignacio Mateos, cuya voz habrán escuchado algunos de ustedes en el informativo NO-DO, quien también fue Jefe de Redacción de T.V.E. durante sus principio en el Paseo de la Habana de Madrid.
Pero no supongan que las manos ocultas y las intenciones perversas aplacaron su furor. Sino que pasaron el estigma contra esta obra de unas a otras. De manera que con tanta prestidigitación fuera difícil seguir la pista de los interesados en dificultar cuanto realizara la Agrupación Sindical de Escritores Españoles.
Nos lo manifestó el hecho por el cual fue imposible que el 5.3.1962, la obra de Teatro fuera representada en Chile, según los propósitos que sus autores y esta Presidencia tuvieron en aquel tiempo. Se trataba de que uno de nuestro afiliados y directivos de la Delegación Sindical en aquel País, Don Eduardo Arrau Allende, informara a su hijo de nuestras intenciones de que fuera él quien mejor se encargara de su puesta en escena, tanto en Chile, como en Perú.
Sergio Arrau Castillo, su hijo, residía en Lima, y poseía las cualidades necesarias y experiencia suficiente para hacerse cargo de este obra de Teatro. Había estudiado Teatro en la Escuela Experimental de la Universidad de Chile. Se recibió en Actuación, Montaje y Dirección. Fue Profesor de Actuación en la Escuela de Verano de Arica (Chile). Después pasó a Lima (Perú), donde también fue Prof. de la ENAS (Escuela Nacional de Arte Escénico). En Lima era Director del Teatro Universitario del Perú, y además autor de obras de teatro. Efectos producido por dificultades diversas ajenas a nuestros propósitos comenzaron a sucederse, de tal manera, que nos pusieron en trance de evitar nuestras atenciones con respecto a estos dos Países.
Se intentó de nuevo en 1969, pero fue imposible porque las manos ocultas movieron los naipes de la baraja política aprovechando el acontecimiento de que el General Franco designara a Juan Carlos de Borbón Sucesor a Título de Rey. También contábamos con apoyos de autores bolivianos que se interesaron por la representación de esta obra con independencia de la actividad profesional de otras compañías, pero la fatalidad política que a veces es causalidad, jugó sin intención contra nuestros deseos favoreciendo a los contrarios, a quienes le vino "de perlas" el suceso: "Muerte del General Barrientos", Presidente de la Nación.
De todas maneras, fue un año de acontecimientos mundiales, similar a todos los años en que la política es manejada con intenciones diversas: De Goulle, fue derrotado en un Referéndum, y le sucedió Georges Pompìdeus, sin que los más necesitados se vieran favorecidos en sus necesidades, ni antes por De Goulle, ni después por Pompideu. Lo mismo ocurrió durante el desorden social movido por Mao quien en el disfrute del poder, tal como si fuera un dios bárbaro, designo como sucesor suyo al General Lin Piao, con el fin que los trapos sucios del régimen los limpiara otro de su corte y confección.
Para que además las gentes interesadas en su defectuosa situación económica, en proporción mayor que los políticos y empresarios ricos de la época con la suya, pensaran menos; aprovechando la conmemoración de la "guerra de los seis días", comenzaron disturbios graves en territorios ocupados por Israél.
¿Qué hubo un mucho de todo aún que no afectara a esta Entidad? Desde todo orden de amor al prójimo que se debería tener, pues sí que hubo: Husak, reemplazó a Dubêk, primer Secretario del Partido Comunista en Checoslovaquía. Inglaterra, envió tropas a Irlanda con motivo de los enfrentamientos entre católicos y protestantes.
Durante la ausencia del Emir Ídris, el Ejército libio proclama la República, y Grecia se retiró del Consejo de Europa, mientras que por intrigas políticas que causaron alteraciones de orden público, Golda Meir fue nombrada Primer Ministro de la India. Pero no crean ustedes que el resto del mundo carecía de intereses propios y era un paraíso conseguido por sus políticos, que eso es más dificultoso de creer: porque los sucesos del Pakistán obligaron a su Presidente Ayub a dimitir, quien fue sustituido por Yahya Khan que estableció la Ley Marcial; y en España, para estar de conformidad con los hechos internacionales y no destacar demasiado, algunos listillos de turno confeccionaron con gran cuidado, el llamado después, "Caso Matesa".
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