El rey Luis Antonio Jaime de Borbón, Infante de España, había recibido nombramientos eclesiásticos pero no llegó a ejercer ninguno, por lo que renunció a todos ellos. Ostentó el titulo de Conde de Chinchón, y a su muerte, antes dicha, fue enterrado en el convento de San Pedro de Alcántara, sito en la proximidad de Ávila. Sus restos se trasladaron después al Panteón de Infantes del Monasterio de El Escorial.
Casó el 27 de junio de 1776 con María Teresa Fernanda Victoria D. Vallabriga; hija del Capitán noble de Infantería, Don José Ignacio de Vallabriga y D. Por otra parte la esposa de Felipe V de Borbón, rey de España, se retiró al Real sitio de San Ildefonso de La Granja en Segovia, y por fallecimiento de su hijo el rey Luis I, el trono volvió a Felipe V, el día 6 de septiembre de 1724.
Entre tanto, el hijo primogénito de su primera esposa Gabriela de Saboya, llamado Luis Fernando de Borbón, había nacido en Madrid el día 27 de agosto de 1707 y fue bautizado el 18 de diciembre. Apadrinó al nacido su bisabuelo el rey Luis XIV de Francia. El 20 de enero de 1722 había casado, según algunos genealogistas, en Lerma, Burgos, con Isabel Luisa de Orleans, Mammoiselle de Mompensier, hija de Felipe II, Duque de Orleans, y Regente de Francia durante la minoría de edad del rey Luis XV. Cuando quedó viuda, regresó a Francia con su hermana Felipa Isabel, quien estaba propuesta como esposa del rey Carlos III.
Este resumen nos vuelve a llevar a la fase segunda del reinado de Felipe V, cuyos antecedentes tienen las ventajas de la conquista de Orán en 1732, según auge conseguido por la Marina española gracias a los esfuerzos e iniciativas de José Patiño. No por eso difiere de otras conquistas llevadas a cabo por emperadores y reyes. El poder, cualquiera que sea, se manifiesta de manera agresiva, tanto para el gobierno y desarrollo de los pueblos, como para los intereses nacionales o económicos de sus gobernantes y haciendas.
Se ganó Orán, pero los fallecidos que eran indispensables para sus familias, seguirían siéndolo, si estas todavía vivieran. ¡Se perdieron muchas vidas, y la economía sufrió un descalabro serio para los trabajadores; siempre desigualados en su economía de aquellos otros más cualificados que usaban puñetes, en las mangas! Como quiera que tal hecho bélico animó las ansias de poder, proseguimos conquistando territorios en Nápoles y Sicilia, conforme con los criterios del Conde de Montemar y el infante Carlos.
Menos mal que se firmó un Tratado de Paz, porque en caso contrario, la Corona primero, y la República después de algún tiempo, aún estarían enzarzadas con Austria e Inglaterra. A consecuencia de estos tratados de paz, España renunció a Toscana, Plasencia y Parma. Inglaterra, con mucha razón suponía que España, mejor dicho, Felipe V, ansiaba más conquistas territoriales en Italia para su hijo el infante Felipe engendrado con su esposa Isabel de Farnesio.
Inglaterra fue aliada de Cerdeña, y España de Francia, por lo cual las muertes prosiguieron y fueron muy numerosas hasta el fallecimiento de Felipe V, ocurrido el día 9 de junio de 1746. Ahora, como entonces, estamos matando a la parte mayoritaria de las generaciones nuevas por falta de medios económicos. De donde se sigue que fue igual de trágico; y muchos emigraron buscando trabajo, antes de que la pobreza severa y radical llamara a sus puertas.
La mayoría de estos trabajadores emigrantes, no se "enriquecieron" entonces, ni se han "enriquecido" ahora, como afirma el Gobierno actual. Eso ocurrió con otros emigrantes gallegos, cuando por razones parecidas emigraron "a las Américas" para hacer fortuna. Algunos regresaron con dinero, y fueron los llamados "Indianos", a quienes tal vez el dios Breogán del Himno Gallego, les salió al paso de sus sueños de gloria.
¿Qué no digo la verdad? Púes vean ustedes lo que decía el escritor Julio Senador Gómez en 1915: "YA NO TENEMOS COLONIAS EN QUE EMPLEAR A LOS QUE AQUÍ NO HALLAN TRABAJO. EL MUNDO ENTERO ESTÁ SEMBRADO DE HUESOS DE EMIGRANTES ESPAÑOLES". ¿Se enteran ustedes porque la realidad histórica comparada termina con la propaganda poco inteligente? ¡No deben olvidarlo tampoco en el partido político de Podemos, porque se les ha visto el plumero de sus ansías de poder!
Hay hechos que son inamovibles: entre ellos la desigualdad que existe, y que ningún gobierno ha querido erradicar y es una de sus obligaciones perentorias. ¡Y no basta con echar parches porosos en la hoya donde se cuecen las mismas habas que cocieron todos loas demás partidos, sino llegar al poder para solucionar lo que tienen obligación de solucionar; lo contrario está arriesgando el malestar de los desigualados a quienes deben proteger; les guste o no! ¡Recuerden todos los políticos que la cumbre de Lisboa, aprobó el objetivo social del pleno empleo!
De nada sirve que el gobierno grave los bienes de los capitalistas, ni de las empresas multinacionales, porque estos impuestos los repartirán en el valor de sus productos, de donde resultará que el capital seguirá ganando y el pobre aumentará su pobreza. De manera que la mal llamada "pobreza energética", significa pobreza económica general, no generada por el trabajador empobrecido, ni por el pensionista de economía media, sino por políticos corruptos y empresas capitalistas desvergonzadas, punitivas, y logreras.
¿Cómo acabar con la pobreza energética? ¡Es de lo más sencillo desde el criterio del Gobierno! Se dispensa a los usuarios del fluido eléctrico el corte de luz, no de la deuda; siempre y cuando sea por falta de ingresos económicos suficientes, y además demuestren que están incluidos entre los "pobres de pobreza severa" ¿Y esos otros que tampoco pueden abonar el mismo gasto porque su pensión resulta escasa por subidas del índice de coste de la vida, ¡Ah esos, ya se les subió el 0,25 por ciento de su pensión! ¿Qué más quieren?
Lo razonable, lógico, y necesario, sería determinar que es en realidad la pobreza en sí misma. Dos categorías han sido señaladas como fuentes de inspiración para fundamentarla: la pobreza que alcanza a muchos, porque las prestaciones de la Inseguridad Social, son en la mayoría de los casos, deficientes.
Porque el latrocinio político y capitalista de otros muchos políticos y capitalistas, ha dejado sin trabajo a una mayoría de familias que viven de la "jubilación del abuelo", quien además tiene la vergüenza de callar su situación, porque nació en un tiempo en que la vergüenza tenía carta de naturaleza. Estos son pobres auténticos, preformados por los que no tiene vergüenza.
Por último, están los denominados indigentes. Pero a estos no les alcanza los grandes bienes de la pobreza energética, porque no pagan luz; ni consumen agua pura del Canal de Doña Isabel II; sino que tienen que ir hasta el barrio del señor Iglesias, de Podemos, donde han instalado una fuentecilla, si es quieren beber agua purificada como fue pura la llamada "fuente del Berro".
Los demás menesteres fisiológicos los ejecutan donde pueden, o les da la gana, porque son indigentes, y es una forma de protesta pública, como lo fue la inconformidad juvenil contra la esclavitud social y de trabajo. ¿Además, cómo es posible que la señora alcaldesa ponga urinarios a 0,10 céntimos la entrada, si la subida de pensiones es solo de 0,25 céntimos, y para colmo de males la parte mayor de indigentes no perciben subvención alguna?
Es posible que ellos estén interpretando el Don Juan Tenorio de Zorrilla. Aquella escena en que Don Juan, declama: "¡Ya mea el cielo, y no meo yo, más si sus `puertas me cierra...". Dejando como otras veces el tono y decir festivos, la realidad fue que España tuvo un desajuste económico semejante al actual, pero menos grave, y a la sucesión en el trono de Fernando VI, se pudo rehacer la Hacienda de las Españas, pero con menos Españas.
El único varón; vivo, del primer matrimonio de Felipe V, fue Fernando VI, y aunque hubo historiadores que le diagnosticaron de mente enferma, supo elegir a la persona capaz de rehacer la situación ruinosa de España, sangrada por guerras e intereses que poco se diferenciaron de los actuales. Verdad fue que, su debilidad, estuvo más significada por aguantar el mangoneo matrimonial de su mujer a quien veneraba adicción y acatamiento caprichosos.
María Teresa Barbara de Braganza, su esposa, hija de Juan V de Portugal, era una mujer de voluntad impositiva, pero no hasta el extremo de tomar decisiones de carácter político que estorbaran las de Fernando. Lo atestigua el hecho de que el rey supo encontrar a la persona mejor dotada para resolver el problema financiero de la Hacienda española: fue el Marqués de la Ensenada, don Cenon de Somodevilla y Bengoechea.
¿Qué hubo guerras? ¡Pués claro; eso era corriente desde milenios! Los intereses políticos hacen lo increíble por no perder el "meme" del poder. Aunque la idea no era del agrado de Fernando, para no perder lo que no quería perder, tuvo que enfrentarse su hermano Felipe que deseaba poseer los ducados de Plasencia y Parma. Motivo por el cual se vio obligado a guerrear en Italia hasta que seguro de sus ducados, firmó el Tratado de Paz denominado de Aquisgrán (1748).
Las guerras, siempre las necesitan los detentadores de poder, pero no las integran ellos, sino los hombres, y ahora también mujeres del pueblo. Incluso, los indigentes y los abuelos pensionistas, si fuera necesario. Esos seres sociales que son pura estadística y sirven para hacer bulto en las guerras y manifestaciones; y se les promete un "estado de bienestar" al 0,25 por tonto. ¡No culpo a este Gobierno de la pobreza energética, sino también a todos los demás reformistas políticos habidos desde el primer mandatario que eligieron las sociedades evolucionadas y revolucionadas.
Echen un vistazo sesgado y rápido a estas sociedades politizadas por los mandatarios, y vean como en el ámbito de los derechos sociales y laborales, tanto Alemania como Inglaterra, han sido quienes impusieron su cuño en la economía de mercado. ¡Economía que incluye el "bis a bis" del mundo empresarial capitalista, con aquellos gobiernos que olvidan el cumplimiento de su Contrato de Mandato con el pueblo, basado en las garantías obligadas de la Constitución!
Dejemos hoy, al menos, de cuantificar errores comparados de la historia, que junto a pequeños y mensurables aciertos de los gobiernos, salpicaron a las clases más necesitadas de medios económicos. ¡Como teorizaba Einstein, volemos a más de 300.000 kilómetros por hora donde nos aguarda la cuarta dimensión; esa cuarta dimensión ignorada e ignota, que puede ser un suspiro desesperado, como un lugar mágico de ensueño donde todos los prodigios serian posibles.
Corramos el peplo azul que rodea nuestro Planeta, y allá en el silencio de nosotros mismos; en el secreto aún misterioso para la Ciencia, como es nuestra mente, regresemos del que fue paralelo 38 político para enfrentarnos con nuestro destino; y allí desear a grandes y pequeños; mujeres y hombres; gobiernos y oposiciones; ricos y pobres; buenos y menos malos; el bien que esta Presidencia desea en general para todos, lean o no sus informes, un universo de paz, ventura y grandeza sin límites posibles.
!MIRAR AL CIELO Y ELEGIR DOCE ESTRELLAS: NOS ESTÁN ESPERANDO! ¡SER FELICES DESDE DOS MIL DIECISIETE!
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