BIBLIOGRAFIA.- "Documentos acerca de la expulsión de los judíos", Suarez Fernández L. (Valladolid 1968).- "Los Judíos Conversos en España y América", Domingo Ortíz, A. (Madrid, 1971).- "Las tres culturas de la Corona de Castilla y los Sefardies", (Actas de las jornadas sefardies y del Seminario de las tres culturas. (Valladolid, 1990), AA.W.- "Enciclopedia de las religiones", Vidal, C. (Barcelona, 1997).- "Historia de las creencias y las ideas religiosas". Eliade, M. (Madrid, 1980).- "Jeremías y palabras desconocidas de Jesús", (Salamanca 1984).- "Orígenes del cristianismo", Piñeiro,A. (Córdoba, 1991).
Debo significar, en esta parte correspondiente a los asuntos generales que rodean a este Sindicato apolítico, pero que por lo mismo, ni puede, ni debe estar ausente de acontecimientos con vigencia social; qué el debate entre el Señor Presidente del Gobierno, y el Señor Representante de la oposición política, no pudo ser más demagógico.
Cumplió un fin publicista, propio de cualquier régimen que ha perdido la "aguja de marear." No sólo por los temas elegidos, aún no resueltos. También por falta de experiencia política de Estado del pretendiente a la Presidencia, donde su discurso no tenía más valor que el correspondiente a un propósito subjuntivo, y potencial simple, cómo el de "queremos hacer", "haremos", o "podemos hacer"... Lamentable dicción de ambos, acompañada de "inquina" retrasada por un pasado político ya enterrado bajo las arenas del tiempo.
Uno, sin pasado político: "¡Dartañan al ataque! de los dibujos animados. Otro, perdido en la situación caótica que asola al mundo y las necesidades inminentes de aquellos que no comen y duermen entre cartones: Paro aberrante, producido por quienes teniendo en su mano los ritos del poder, los usaron y usan, para abjurar de su grandeza; ¡aquellos que ignoran haber firmado con el Pueblo un Contrato de Mandato!
!En conclusión, espectáculo digno del "monipodio" en que se ha convertido el Mundo!
Los debates finales deberían ser suprimidos, pero comprendo que una Democracia no puede prescindir de esta figura que la identifica; como al Carnaval, su"entierro de la sardina". Si a este espectáculo añadimos la agresión a un Presidente del Gobierno, sea el que fuere, como le ha ocurrido al Señor Rajoy, podemos asegurar que en España, el "rencor y la inquina" acampan por rincones tenebrosos del pasado, que no ilustró "ilustración" alguna.
En propaganda política habrán leído ustedes propósitos loables de todos, ningunos tan claros como estos: "suspender las autonomías que muestran deslealtad"; "hay que procesar a los sublevados"; "...los más débiles que han sido abandonados y traicionados por distintos gobiernos"· "...los autónomos, los comercios y las empresas familiares precisan más apoyo".
Pues bien, esas pequeña EMPRESAS, algunas, muchas; sobre todo cafeterías y restaurantes, se dedican a emplear trabajadores por media jornada, y también cuatro o cinco horas, tienen a los "extras" más tiempo del apalabrado y después pagan la mitad de lo que deberían. Miopía galopante de los Servicios Laborales de Inspección. Hay un refrán castellano que deberían aplicar todos los partidos políticos, o no dedicarse a este "salpullido" de asociaciones inútiles que invade a España. Porque si el Estado apoya a todas de medios económicos, terminará habiendo un partido político por cada español. El refrán dice: "OBRAS SON AMORES Y NO BUENAS RAZONES".
En propaganda política habrán leído ustedes propósitos loables de todos, ningunos tan claros como estos: "suspender las autonomías que muestran deslealtad"; "hay que procesar a los sublevados"; "...los más débiles que han sido abandonados y traicionados por distintos gobiernos"· "...los autónomos, los comercios y las empresas familiares precisan más apoyo".
Pues bien, esas pequeña EMPRESAS, algunas, muchas; sobre todo cafeterías y restaurantes, se dedican a emplear trabajadores por media jornada, y también cuatro o cinco horas, tienen a los "extras" más tiempo del apalabrado y después pagan la mitad de lo que deberían. Miopía galopante de los Servicios Laborales de Inspección. Hay un refrán castellano que deberían aplicar todos los partidos políticos, o no dedicarse a este "salpullido" de asociaciones inútiles que invade a España. Porque si el Estado apoya a todas de medios económicos, terminará habiendo un partido político por cada español. El refrán dice: "OBRAS SON AMORES Y NO BUENAS RAZONES".
Transcribimos entre otras colaboraciones literarias estrictas, de esta Presidencia en las publicaciones del Sindicato, la Ponencia titulada: "¿ESTAMOS AL BORDE ROMÁNTICO DE LO INCREÍBLE?, precedida por palabras de saludo a todos los asistentes, que fue publicadas en "AIR", Colección "Ciele-Icwel, (Convención Internacional de Escritores de Lenguas Europeas. Es larga, y ocupará varios espacios:
"Queridos amigos y compañeros:- Comienza hoy esta Convención bianual para tratar asuntos de valía indudable y belleza poética. Ponencias transcritas a varios idiomas con docta fidelidad por Mariette Cirerol, Presidenta del Comité Internacional, y editora de AIR, a quien agradecemos el trabajo ímprobo e intenso de su preparación, tanto de estos eventos, como de sus contenidos.
Vuestra presencia aquí cada dos años, en la CASA DE ESPIRITUALIDAD, que nos recibe con tanto cariño, ha sugerido mi ponencia sobre el Romanticismo. Porque románticos somos todos nosotros, dispuestos siempre a continuar caminando por senderos de vocación. No lo fueron sólo los poetas populares del siglo XIV, a través de Escuelas, como la Castellana, que también: Poesía erudita, lírica y pastoral, nacida del verso popular, cantada por juglares de boca y tamboril, endechas y romanceros.
Así mismo, aquellos más identificados con el romanticismo intelectual, como Alfredo Musset, Jorge Sand, José Zorrilla, Ramón Mesonero Romanos y Gutierrez de Cetina, entre tantos otros creadores líricos de la palabra. Todos quienes lleven en su alma y en su pensamiento un ideal positivo por realizar.
En otras poesías, las bucólicas contienen lírica y humanizan a la Naturaleza. De manera que hoy, este "coplero romántico" quiere saludaros con el abrazo de esta poesía:
"EL ÁRBOL Y EL VIENTO".
"Un día que fui a pescar/ a las orillas de un río/ junto a un álamo sombrío,/ escuché sus suspirar.
Era tan dulce el cantar de su fronda centenaria/ y de tal tono su aria/ que me pareció llorar.
Quise su llanto escuchar/ y saber de su lamento./ ¡Vi que las hojas y el viento/ se acababan de besar"
"Cierto que el romanticismo no fue sólo motivo literario de una época; sino manera de ser personal y modo de estar en el Mundo. Se manifestó en el arte literario con lirismo y belleza. Su permanencia en el tiempo es consecuencia inmanente y sugestiva para conseguir un ideal, nunca un sentimiento lánguido como lo pretendido por aquella imagen del escritor exudando melancolía casi por todos sus poros. Aquel de amores imposibles, neuróticos y suicidas, exaltados como modelos de una época. Tal manipulación de la realidad no se corresponde con la personalidad romántica en absoluto.
El Romanticismo entendido como moda fue exclusivo del siglo XVIII, aún cuando ya no tuvo vigencia histórica a mediados del siglo XVII. Pero la fiebre romántica capaz de invadir todos los sectores sociales con su fisonomía esperpéntica, no tiene edad, ni entonces, ni ahora. En su tiempo, se transformaron las "ideas e impresiones" estudiadas por Hume, en divergencias con la Cultura, el Arte y la Política. Intervino en los móviles que las ideas suscitan tratando de revolucionar el orden social: de manera que causó la retirada de Metternich, y el criterio contrario al poder absolutista. También la rebeldía de Berlín, Sajonia, Baviera, Milán y Piamonte.
Guizot editó muchos textos con propaganda política, Lamartine no solo escribía obras románticas como RAFAEL Y GRAZIELLA, también propugnaba un cambio social, refrendado por Chateaubriand y Víctor Hugo. La guerra de Secesión y las ideas que enmanciparon las colonias españolas, fueron anticipos del socialismo revolucionario de Karl Marx. La filosofía y la Ciencia sufrieron el salpullido de un romanticismo equívoco, ansioso de libertad sin límites. Se utilizó la filosofía de Kant para justificar la moral romántica, la exaltación de las pasiones y la divinización del sexo. Incluso, se criticó a la Justicia y hasta a Dios.
Fue cultivado el género epistolar amoroso desde antes del año 1820. Notas manuscritas de amor apasionado y textos extensos se utilizaron para concretar citas. En toda Europa, Ossian fue considerado alma sensible de la poética, autor de obras como FINGAL y TEMORA. Macpherson, Johonson, Voltaire, Casarotti, Diderot, La Fontaine, Grimm y Goethe, propugnaron la prosa con estilo nuevo.
Muchos han considerado el estilo literario romántico, como si fuera moneda acuñada con efigie idéntica. No es así, porque además de su forma externa, esta impulsado por un motivo sensible idealista que pretende renovar sistemas políticos, sociales y culturales. Ciencia, Arte, Literatura y Política, están en lo más íntimo de nuestro ser y forman parte de la conciencia colectiva. ¿Qué otra cosa pretendió Charles Baudelaire, poniendo al descubierto las costumbres corruptas de su tiempo? Escribió LAS FLORES DEL MAL contra la sociedad europea conservadora, inmoral e hipócrita. Esta obra publicada en 1857, causó su procesamiento. Después hubo manifestaciones públicas de escritores antisociales, a las que asistieron Theophile Gautier, Gérar de Nerval, Arthur Rimbaud, y el gran poeta Verlaine.
Pretendían además, cambiar normas preceptivas literarias para dejar el alma en libertad creadora y elevación lírica de la idea en su forma de expresión. Nos guste o no, parezca inoportuno o absurdo, fue un movimiento romántico en cuanto a intención renovadora se refiere. Similar al de Edgar Allan Poe, con sus obras de terror. Literatura libre y simbolista que produjo cambios de criterios tenidos antes como inamovibles; y ahora, menos vituperados por la sociedad. La revolución Romántica fue la prosa rimada y los poemas en prosa, como SPLEEN DE PARÍS, 1869. Fue romántico Lawrence Krauss, divulgador científico de Estados Unidos, quien escribió HISTORIA DE UN ÁTOMO (Editorial Laetoli). Bella comparación con las estrellas y el mármol bien cincelado, que se encuentra en el museo Rodin: Revolución del Arte y poesía del mundo físico.
El clasicismo romántico duró tres siglos, pero su espíritu renovador permanece inalterable. Como con secuencia de éste mi criterio, incluyo entre los románticos a Brissot, a Cabet Gwen, a San Simón y a Descartes. Lo fueron Edmund Cartwright, descubridor del telar, en 1784; y Robert Fulton, quien aplicó vapor de agua para impulsar un buque. También aquellos filósofos que trataron de dar sentido y trascendencia a interrogantes sobre la vida, el alma y el fin último del espíritu humano; Kar Marx, filósofo y economista, autor del CAPITAL. Walter Burley con sus comentarios sobre física, política y ética de Aristóteles. Contrario al avance del averroísmo y a separar del conocimiento filosófico creencias fundamentadas en la fe. A sus 77 años aún defendió sus ideas ante el rey Felipe y ante la Facultad de Teología y Arte.
Romántico, sin duda, el catolicismo romano en Alemania durante el siglo XIX, opuesto a un Estado laico y al reformismo católico admitido por la jerarquía eclesiástica. Románticos fueron también los socialistas místicos San Simonianos, pese a su confusión sobre la existencia de un alma colectiva. Los seguidores de Comet, positivistas, cuyos métodos se utilizaron después en ciencias biológicas. ¿Por qué no Paracelso? alquimista, cuyos experimentos impulsaron el estudio de la Naturaleza y de la Química.
Romántico, a mi modo de ver, todo impulso cuyo fin pretenda renovar lo conocido, dando luz a ideas positivas y superación del conocimiento humano. De alguna manera, Goethe creía en esta idea mantenida por Baruch, pensador situado entre Oriente y Occidente. También la desesperación forma parte del sentimiento romanticista, tanto como el amor al sexo diferente. Gusatavo Aldolfo Bécquer lo expresó así:
"Mientras haya unos ojos que reflejen
los ojos que los miran,
mientras responda el labio suspirando
al labio que suspira,
mientras sentirse puedan en un beso
dos almas confundidas,
mientras exista una mujer hermosa,
habrá poesía.
(SIGUE)
Vuestra presencia aquí cada dos años, en la CASA DE ESPIRITUALIDAD, que nos recibe con tanto cariño, ha sugerido mi ponencia sobre el Romanticismo. Porque románticos somos todos nosotros, dispuestos siempre a continuar caminando por senderos de vocación. No lo fueron sólo los poetas populares del siglo XIV, a través de Escuelas, como la Castellana, que también: Poesía erudita, lírica y pastoral, nacida del verso popular, cantada por juglares de boca y tamboril, endechas y romanceros.
Así mismo, aquellos más identificados con el romanticismo intelectual, como Alfredo Musset, Jorge Sand, José Zorrilla, Ramón Mesonero Romanos y Gutierrez de Cetina, entre tantos otros creadores líricos de la palabra. Todos quienes lleven en su alma y en su pensamiento un ideal positivo por realizar.
En otras poesías, las bucólicas contienen lírica y humanizan a la Naturaleza. De manera que hoy, este "coplero romántico" quiere saludaros con el abrazo de esta poesía:
"EL ÁRBOL Y EL VIENTO".
"Un día que fui a pescar/ a las orillas de un río/ junto a un álamo sombrío,/ escuché sus suspirar.
Era tan dulce el cantar de su fronda centenaria/ y de tal tono su aria/ que me pareció llorar.
Quise su llanto escuchar/ y saber de su lamento./ ¡Vi que las hojas y el viento/ se acababan de besar"
"Cierto que el romanticismo no fue sólo motivo literario de una época; sino manera de ser personal y modo de estar en el Mundo. Se manifestó en el arte literario con lirismo y belleza. Su permanencia en el tiempo es consecuencia inmanente y sugestiva para conseguir un ideal, nunca un sentimiento lánguido como lo pretendido por aquella imagen del escritor exudando melancolía casi por todos sus poros. Aquel de amores imposibles, neuróticos y suicidas, exaltados como modelos de una época. Tal manipulación de la realidad no se corresponde con la personalidad romántica en absoluto.
El Romanticismo entendido como moda fue exclusivo del siglo XVIII, aún cuando ya no tuvo vigencia histórica a mediados del siglo XVII. Pero la fiebre romántica capaz de invadir todos los sectores sociales con su fisonomía esperpéntica, no tiene edad, ni entonces, ni ahora. En su tiempo, se transformaron las "ideas e impresiones" estudiadas por Hume, en divergencias con la Cultura, el Arte y la Política. Intervino en los móviles que las ideas suscitan tratando de revolucionar el orden social: de manera que causó la retirada de Metternich, y el criterio contrario al poder absolutista. También la rebeldía de Berlín, Sajonia, Baviera, Milán y Piamonte.
Guizot editó muchos textos con propaganda política, Lamartine no solo escribía obras románticas como RAFAEL Y GRAZIELLA, también propugnaba un cambio social, refrendado por Chateaubriand y Víctor Hugo. La guerra de Secesión y las ideas que enmanciparon las colonias españolas, fueron anticipos del socialismo revolucionario de Karl Marx. La filosofía y la Ciencia sufrieron el salpullido de un romanticismo equívoco, ansioso de libertad sin límites. Se utilizó la filosofía de Kant para justificar la moral romántica, la exaltación de las pasiones y la divinización del sexo. Incluso, se criticó a la Justicia y hasta a Dios.
Fue cultivado el género epistolar amoroso desde antes del año 1820. Notas manuscritas de amor apasionado y textos extensos se utilizaron para concretar citas. En toda Europa, Ossian fue considerado alma sensible de la poética, autor de obras como FINGAL y TEMORA. Macpherson, Johonson, Voltaire, Casarotti, Diderot, La Fontaine, Grimm y Goethe, propugnaron la prosa con estilo nuevo.
Muchos han considerado el estilo literario romántico, como si fuera moneda acuñada con efigie idéntica. No es así, porque además de su forma externa, esta impulsado por un motivo sensible idealista que pretende renovar sistemas políticos, sociales y culturales. Ciencia, Arte, Literatura y Política, están en lo más íntimo de nuestro ser y forman parte de la conciencia colectiva. ¿Qué otra cosa pretendió Charles Baudelaire, poniendo al descubierto las costumbres corruptas de su tiempo? Escribió LAS FLORES DEL MAL contra la sociedad europea conservadora, inmoral e hipócrita. Esta obra publicada en 1857, causó su procesamiento. Después hubo manifestaciones públicas de escritores antisociales, a las que asistieron Theophile Gautier, Gérar de Nerval, Arthur Rimbaud, y el gran poeta Verlaine.
Pretendían además, cambiar normas preceptivas literarias para dejar el alma en libertad creadora y elevación lírica de la idea en su forma de expresión. Nos guste o no, parezca inoportuno o absurdo, fue un movimiento romántico en cuanto a intención renovadora se refiere. Similar al de Edgar Allan Poe, con sus obras de terror. Literatura libre y simbolista que produjo cambios de criterios tenidos antes como inamovibles; y ahora, menos vituperados por la sociedad. La revolución Romántica fue la prosa rimada y los poemas en prosa, como SPLEEN DE PARÍS, 1869. Fue romántico Lawrence Krauss, divulgador científico de Estados Unidos, quien escribió HISTORIA DE UN ÁTOMO (Editorial Laetoli). Bella comparación con las estrellas y el mármol bien cincelado, que se encuentra en el museo Rodin: Revolución del Arte y poesía del mundo físico.
El clasicismo romántico duró tres siglos, pero su espíritu renovador permanece inalterable. Como con secuencia de éste mi criterio, incluyo entre los románticos a Brissot, a Cabet Gwen, a San Simón y a Descartes. Lo fueron Edmund Cartwright, descubridor del telar, en 1784; y Robert Fulton, quien aplicó vapor de agua para impulsar un buque. También aquellos filósofos que trataron de dar sentido y trascendencia a interrogantes sobre la vida, el alma y el fin último del espíritu humano; Kar Marx, filósofo y economista, autor del CAPITAL. Walter Burley con sus comentarios sobre física, política y ética de Aristóteles. Contrario al avance del averroísmo y a separar del conocimiento filosófico creencias fundamentadas en la fe. A sus 77 años aún defendió sus ideas ante el rey Felipe y ante la Facultad de Teología y Arte.
Romántico, sin duda, el catolicismo romano en Alemania durante el siglo XIX, opuesto a un Estado laico y al reformismo católico admitido por la jerarquía eclesiástica. Románticos fueron también los socialistas místicos San Simonianos, pese a su confusión sobre la existencia de un alma colectiva. Los seguidores de Comet, positivistas, cuyos métodos se utilizaron después en ciencias biológicas. ¿Por qué no Paracelso? alquimista, cuyos experimentos impulsaron el estudio de la Naturaleza y de la Química.
Romántico, a mi modo de ver, todo impulso cuyo fin pretenda renovar lo conocido, dando luz a ideas positivas y superación del conocimiento humano. De alguna manera, Goethe creía en esta idea mantenida por Baruch, pensador situado entre Oriente y Occidente. También la desesperación forma parte del sentimiento romanticista, tanto como el amor al sexo diferente. Gusatavo Aldolfo Bécquer lo expresó así:
"Mientras haya unos ojos que reflejen
los ojos que los miran,
mientras responda el labio suspirando
al labio que suspira,
mientras sentirse puedan en un beso
dos almas confundidas,
mientras exista una mujer hermosa,
habrá poesía.
(SIGUE)
No hay comentarios:
Publicar un comentario